Súper gripe H3N2: cómo puede impactar en Argentina

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Súper gripe H3N2: cómo puede impactar en Argentina
Súper gripe H3N2: cómo puede impactar en Argentina

Hasta qué punto les servirá la vacuna antigripal de la campaña nacional 2025. Por estos días, la epidemia hace colapsar las guardias de los hospitales en el Reino Unido y otros países de Europa. Afirman que las vacunas que se aplicaron en Europa como en nuestro país, no fueron diseñadas para este virus pero igual ofrecen una protección contra casos graves.


A medida que los medios locales replican el tema, la expresiónH3N2empieza a instalarse y a generar preocupación. Esos cuatro caracteres son el nombre propio de la influenza A, o sea, la gripe que está generando cierto revuelo y alta contagiosidad en países de Europa, donde se estima que los casos podrían estar duplicando los registrados el año pasado. A continuación, por qué atender a este tema en Argentina puede tener algún sentido y hasta qué punto les servirá la vacuna antigripal de la campaña nacional 2025 a quienes vayan a viajar al viejo continente este verano.

La cautela prima en los voceros que consultó Clarín respecto del grado de virulencia de esta peculiar variante gripal. Las cifras de internaciones son dinámicas y, además, todo depende. “Depende” quiere decir de cuánto replique o circule el virus por la población no vacunada. Vale la pena explicar por qué.

​Quienes tengan algún recuerdo de la pandemia de Covid o SARS-CoV-2, quizás tengan presente que la diferencia crucial entre una persona vacunada y una que no lo está es la carga viral que se termina acumulando en el cuerpo, mientras se transita la infección.

En una persona no vacunada, el virus posiblemente logre infectar más células de la persona, lo que, además de causarle síntomas más “marcados” (para decirlo amablemente) y dejarlo en cama más días (en lugar del recorrido leve que podría hacer una persona vacunada), le permitirá (o exigirá, según cómo se lo mire) al virus hacer más fotocopias de sí mismo para infectar más células. Los virus no son seres vivos, pero esa es la única razón de su existencia: replicarse.

Al hacerse tantas copias de un genoma compuesto por montones de letras, las chances de que se produzcan errores de “re-tipeo” o fotocopiado (para graficar el asunto lo más posible) son mayores. Esos errores pueden descartarse en futuras copias del virus o, en cambio, persistir. Si le funcionan al virus para seguir multiplicándose, se instalan como tales. Y cuando eso ocurre, si las diferencias con la versión anterior son sustanciales, uno (más bien, los expertos) empieza a hablar de "mutación", que por supuesto puede ser más o menos agresiva o más o menos contagiosa.

Hablando de contagiosidad, el virólogo Jorge Quarleri (doctor en Bioquímica e investigador Principal del Conicet en el Instituto de Investigaciones Biomédicas en Retrovirus y Sida, o INBIRS), recordó -en diálogo conClarín- que “la mayor transmisibilidad de esta influenza debe enmarcarse en el contexto de ingreso al invierno en el hemisferio norte, lo que propicia elhacinamiento y la falta de ventilaciónde los ambientes cerrados, que son en sí mismos condiciones muy propicias para la transmisión de virus respiratorios, en general”.

“En cuanto a este virus, según los primeros reportes, experimentó variaciones en su 'hemaglutinina'. Es el concepto condensado en la 'H' de su nombre de subtipo, siempre dentro del virus influenza del género 'A'. Esa aparición de mutaciones en la 'H' es esperable porque está asociada a su replicación dentro de la célula que infecta, pero en esta variante de H3N2 en particular, clasificada filogenéticamente dentro de lo que se llama 'clado' (definido como 'K'), se habrían acumulado un número mayor de mutaciones o cambios en la 'H', lo que le permite burlar la respuesta inmune con mayor facilidad”, explicó.

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