En una interesante nota el Secretario General del Sindicato Regional de Luz y Fuerza Córdoba, Máximo Brizuela, comentó: "La actividad laboral es sin duda una necesidad de las personas para poder desarrollarse, como así también la formación y capacitación, pero el trabajo es el punto final donde uno vuelcan todos los saberes y sigue aprendiendo en base a la experiencia. Durante muchos pasajes de la historia se ha intentado ningunear a la clase trabajadora, sepultarla en el olvido y la miseria y tratando de instalar como verdad absoluta que el valor de los laburantes no es significativo en la productividad y desarrollo de los tiempos presentes y futuros. Hoy vemos una vez más que son los trabajadores los que le ponen el cuerpo a las situaciones difíciles", manifestó el dirigente. 
También es preciso decir que la crisis económica actual, expulsó y sigue expulsando a muchos trabajadores de sus posibilidades de desarrollo. Este es un problema mundial, pero golpea especialmente a nuestro país que acarrea una crisis de años.
Un trabajador sin empleo no deja de ser tal. Nos debe llamar la atención y movilizar estas situaciones, para seguir la lucha por todos y cada uno de los trabajadores y trabajadoras de nuestra patria, que no pueden acceder a un empleo digno y digo digno porque siempre abundan las opciones que solo buscan explotar el sudor de las personas con pagos que no alcanzar ni para comer.
Las y los trabajadores somos parte de este mundo, hemos construido el mismo, aunque muchas veces no se nos consulte sobre algunas decisiones. Somos una pieza clave en la sociedad y cada decisión debe ir en la dirección del reconocimiento, dignificación y mayores posibilidades.
En nuestro día debemos celebrar quienes tenemos la dicha de tener empleo, tener esperanza y rezar por quien aún no lo ha conseguido y tener memoria de lo que somos, para que no nos hagan creer que la miseria es nuestro destino.
Feliz día del trabajador y la trabajadora.